Cada concepto en póker conviene ser memorizado, teniendo en cuenta lo importante que es tener el bagaje suficiente para identificar a tipos de jugadores, clases de jugadas, movimientos, aspectos de la partida… todo en el póker tiene una etiqueta, y saber qué representa y cómo influye en el juego es de gran importancia.

Este artículo lo vamos a dedicar a la figura del bumhunter, un tipo de jugador algo peculiar. Muchos desconocen cuál es su rol en las partidas, así que vamos a poner el foco en su manera de jugar, sus pretensiones en la mesa y en sus puntos débiles para poder batirlos.

¿Qué es el bumhunting en póker?

Se conoce como “bumhunting” a la práctica basada en jugar solamente contra jugadores débiles. El término “bumhunt”, traducido literalmente del inglés, significa “caza de vagabundos”, lo que te puede permitir hacerte una idea de lo que buscan estos jugadores.

Al jugar de manera exclusiva contra jugadores débiles, los llamados “fishes” o “pececillos”, pueden aprovecharse de su inexperiencia para sacar mayor tajada en los premios. Pero los bumhunters tienen un punto débil: si se delatan, pocos novatos querrán jugar contra ellos. No es que el bumhunting sea algo sucio, pero si un bumhunter juega contra ti, sabrás que busca aprovecharse de tu poco recorrido en el póker, por lo que casi seguro que sabrás de antemano que vas a perder. Y nadie quiere eso, por lo que muchas veces los bumhunters saben jugar bien sus cartas, nunca mejor dicho, para mezclarse con otros jugadores y no ser identificados.

Es muy fácil reconocer a un bumhunter si se juega en mesas de alto nivel: cuando los rivales son todos buenos o el juego es duro, el bumhunter suele foldear o retirarse directamente de la mesa. Tiene claro que un enfrentamiento contra jugadores curtidos no es lo que busca, así que decide irse. Suelen quedarse un rato explorando la mesa para identificar a jugadores débiles de los que aprovecharse, y si no lo ven claro, se retiran.

Eso exige paciencia, algo que caracteriza a los bumhunters. Sí, son jugadores extremadamente pacientes. Si se unen a una mesa de cash online heads-up y no hay jugadores débiles, se quedan sin jugar, a la espera de que llegue uno para empezar su caza.

Si tienes algo de experiencia, identificar al bumhunter te puede dar algo de ventaja, porque te permite tener claro quién es el jugador débil de la mesa. Con un bumhunter activo en la mesa, podrás jugar sin centrarte en esos dos jugadores, que estarán compitiendo entre sí, enzarzados en una pelea que el pececillo tiene perdida desde el principio.

Como jugador curtido, te puedes aprovechar de las dotes del bumhunter, sobre todo si ha desplumado a varios fishes, para empujarlo a jugar fuerte y llevarte sus fichas. Si no se retira antes, claro.

Esto lo puedes aprovechar si el bumhunter ha conseguido desplumar a varios jugadores débiles y tiene un buen montante de fichas en su poder, aunque solo podrás hacerlo cuando el bumhunter entre en el juego, que será cuando haya un jugador débil en la mano.

Qué hace un bumhunter en una partida de póker

La premisa de los bumhunters es sencilla: aprovecharse de los inexpertos para sacar tajada y ampliar sus ganancias. Se unen a una mesa de cash, empiezan a estudiar a los jugadores, identifican su experiencia y, si es poca, van a por ellos. Aunque no es ilegal hacer esto, sí es algo sucio que no está bien visto, sobre todo porque es aprovecharse de la inexperiencia de los menos experimentados o de los que acaban de llegar al póker y quieren disfrutar en partidas con dinero real.

Cuando localizan a un pececillo, juegan la mano y van a por él. No se meten en el juego si no tienen ya fichado al pececillo de la partida, pero son capaces de esperar hasta tener claro quién es el rival más débil. Si no lo ven claro, se irán de la partida en busca de mesas donde los pececillos salgan más claramente.

Por norma general, los bumhunters juegan muy tight. Siempre piensan que tienen muchas probabilidades de vencer al rival que consideran que es el más débil, y son propensos a no sobreactuar si no pierden la paciencia.

Pero cuando se ven sobrepasados, son muy polarizantes. Pasan de una paciencia extrema a una agresividad excesiva, sobre todo cuando han sido descuidados con sus tells o ni siquiera se han molestado en disimularlos. Es una manera que tienen los bumhunters de delatarse.

Cómo jugar contra un bumhunter

Si tienes poca experiencia, es mejor que no lo hagas. Claro que, ¿cómo puede detectar un novato a un bumhunter hasta que no lo haya desplumado? Es una pregunta difícil de responder. Pero sí te puede servir conocer los puntos débiles de los bumhunters, que hay varios.

Para empezar, son jugadores acomodados, en el sentido de que, al buscar solamente jugar contra jugadores de menor nivel, no están curtidos en situaciones de tensión. Eso los hace huidizos ante cualquier signo de oposición. Si ves un jugador que en cuanto ve algo de resistencia foldea, omitiendo betear o hacer call, es que muy probablemente sea un bumhunter.

Los bumhunters tienen un umbral de aprendizaje limitado por esto mismo. Ellos se desenvuelven bien en su ambiente cómodo, el de no oposición, desplumar a pececillos y marcharse. Eso los hace fáciles de radiografiar. En cuanto cojas algo de tablas y aprendas a identificar los tells, te será sencillo reconocer a un bumhunter.

Presta atención también al juego cruzado. Los bumhunters no están bien vistos por los jugadores de alto nivel, y en cuanto lo detectan, estos van a por los primeros. Es otra señal de que hay un bumhunter en la mesa, y se lo quieren quitar de encima asustándolo con jugadas agresivas o poniéndolos en aprietos. Eso le hará huir. En cambio, si incluso en esas ocasiones se quedara en la mesa, podría no ser un bumhunter.