Las partidas de cash se juegan con dinero real, de ahí su nombre y su tremenda notoriedad, dado que son partidas donde el premio en efectivo puede ser muy suculento y es donde más jugadas espectaculares se pueden ver, debido principalmente a las reacciones de los jugadores.

Y es que se nota que al jugar con dinero real la cosa cambia: esconder los tells es más importante, tener el dinero delante pone más nervioso y jugar por un premio que puede ir creciendo si se va engrosando el bote da otra perspectiva.

Vamos a hacer un breve repaso por algunas de las estrategias más útiles para optar a la victoria en un cash game de póker.

Cash game de póker: qué es y cómo se juega

Las partidas de cash de póker se encuentran entre las más jugadas por quienes se decantan por la adrenalina de las partidas con premios en efectivo. Se trata de un tipo de juego diferente a los torneos, en los que se juega con puntos y donde el esquema de las partidas difiere por completo, pese a mantener la misma esencia estratégica, típica de los juegos de póker.

Para aprender a jugar a las partidas de cash es elemental tener en cuenta los siguientes aspectos:

• Gestiona las mesas como un profesional. En cualquier partida de póker es importante aprender a elegir mesas, pero en los cash games de póker lo es todavía más. Y es que la agresividad y la clase de rivales a los que te enfrentes dependerá en todo momento de tu criterio al elegir mesa. Por eso, es recomendable que eches un vistazo antes a la selección de mesas, y que te crees tu propia alineación para saber entre cuáles elegir.
• Estudia las mesas y a los jugadores. Es crucial que estés atento a cualquier tell que puedas percibir de los jugadores. No dejes de estudiar las mesas para saber qué posibilidades ofrece, cómo se está encarando el juego y cuál están siendo las jugadas de los demás.
• Ten siempre bajo control tu bankroll. Esto es un “back to basics”, no solo en lo que a partidas de cash se refiere, sino al póker en general. Por el bankroll management, o BMR, es fundamental para tratar de llevar a buen puerto cualquier proyecto con el que trabajes. Si eres incapaz de mantener a raya tu bankroll, nunca tendrás a tu alcance la posibilidad de pelear por ninguna recompensa.
• Estudia los rangos de manos preflop. Es fundamental que estudies los rangos de manos preflop para cualquier decisión que tomes. Las tablas de póker te pueden ser de mucha ayuda para guiarte, y debes dedicar tiempo a manejar los rangos porque tu juego postflop dependerá en gran medida de cómo encares tu juego en los primeros compases de la ronda.
• Está bien ser agresivo, pero sin exagerar. Cuidado con la sobreactuación, porque en las partidas de cash puede ser lo que muchos llaman un gran “delator”. En cualquier partida de póker está a la orden del día fingir ser más fuerte de lo que verdaderamente se es, esa es la salsa del juego. Pero llevarlo demasiado lejos te puede colocar en una posición para nada cómoda. Por eso, es importante que midas bien tu manera de jugar, que los tells los trabajes y que nunca parezcas falso. Porque si vas de agresivo y se te ve el plumero, automáticamente quienes te tuvieran miedo empezarán a calarte de inmediato.
• Ten en cuenta que tu juego va siempre dirigido a un jugador. En cualquier partida de póker de cash game, es un error habitual querer optar al premio gordo peleándose con todos. Pero el hecho de que sea una mesa con un número de jugadores más reducido no quiere decir que tengas que enfrentarte a todos para ganar. El camino al éxito en los cash games de póker pasa por el hecho de focalizar tu juego hacia un solo jugador. Para eso, es importante que averigües quién realmente te puede pelear la mano, dado que ese será tu “villano”, y que centres todas tus estrategias en aplacarle.
• No te conviene abusar de los faroles. Si no te conviene sobreactuar, mucho menos abusar de los bluffs. De por sí, hablamos del farol como un recurso que solo los profesionales saben dominar, pero adquiere un cariz más complicado incluso en las partidas con dinero en efectivo. Si te la vas a jugar con un farol, cuidado, porque si abusas de ellos enseguida se verá que pretendes jugar más manos de las que te corresponderían por estadística.

Tips estratégicos para ganar en cash games de póker

Si nos paramos a pensar en el punto de vista estratégico, enseguida veremos varias formas de intentar fundamentar mejor nuestro juego en una partida de póker en general y en un cash game en particular.

Un aspecto básico: la rentabilidad de las apuestas. Si no nos ofrecen más dinero por euro apostado que el dinero por euro de las odds, no nos interesa. Porque lo último que queremos es que nos cueste dinero jugar, y es lo que va a pasar si nos metemos en una apuesta que no nos ofrece un reward superior por euro apostado.

Otro aspecto que te conviene dominar: las odds implícitas inversas. Pero cuidado, es un recurso solamente reservado para aquellas manos en las que tenemos mucho que perder y poco que ganar. Normalmente, en estas manos donde la balanza está tan inclinada tan poco a favor nuestro, fácilmente nos podemos ver superados. Tener en cuenta las reverse implied odds nos puede permitir mantenernos delante, así que tenlas en cuenta.

La agresividad tienes que aprender a medirla, sobre todo en las calles finales. Jugar un proyecto en el flop de manera agresiva está genial, pero si te calan para el juego postflop, te las vas a ver y desear para mantenerte dentro de la partida. Probablemente no llegues al showdown, y eso ocurrirá no ser agresivo antes de lo que tocaba. La impaciencia castiga al jugador, especialmente en los juegos de cash.

Eso nos lleva a una conclusión: hay que desarrollar un arte para mantener nuestro juego fuera del foco del resto. Porque todos tus rivales también focalizarán su proyecto en un jugador, y si somos nosotros y nos pasamos de rosca, game over. No radiografiar nuestro juego es el primer paso para optar al premio, confundiendo al resto para que nunca sepan por dónde vamos a salir.